Para comprender el riesgo y las posibilidades de evitarlo
lee el texto de debajo o si lo prefieres puedes ver este breve video que lo
explica igualmente. Gracias:
Los remedios naturales que
intereses políticos e industria farmacéutica quieren prohibir
Imagine
que su hijo, o su pareja, estuviera gravemente enfermo. Y que existe un remedio
natural, sin peligros ni efectos secundarios, que quizás podría curarle. Pero
la Unión Europea le prohíbe utilizarlo. En cambio, las autoridades le obligan a
darle medicamentos químicos con efectos secundarios potencialmente muy graves.
Usted no tiene elección. Esta absurda pesadilla es una realidad inminente que
amenaza a Europa y a todos sus habitantes, incluidos usted y yo.
Después
de años de lobby (influencias e intereses), las multinacionales farmacéuticas
están logrando su objetivo:
Un nuevo reglamento
draconiano de la Unión Europea hace peligrar a miles de remedios medicinales
naturales utilizados desde hace siglos y que no tienen los efectos secundarios
de los medicamentos modernos derivados de la petroquímica.
Esto
afecta a muchísimos productos naturales, incluidos remedios para el corazón,
las arterias, las articulaciones, el azúcar en la sangre, los huesos, la
memoria, la digestión, el sueño, la vista, la depresión, la fatiga.
Se trata
del Reglamento 1924/2006/EC sobre productos de medicina natural que declaran
tener propiedades saludables.
Este
nuevo reglamento exige a los vendedores de estos productos obtener una
autorización especial de Bruselas para poder informarle a
usted, verbalmente o por escrito, de las propiedades beneficiosas de los
productos naturales.
Esta
autorización la concede un organismo, la EFSA (Agencia Europea de Seguridad
Alimentaria).
El
problema es que tarda de tres a cinco años en tomar sus decisiones. Pero lo
más grave es que de las 44.000 solicitudes de autorización para poder declarar
propiedades "saludables" registradas desde 2008, la EFSA ha
autorizado hasta ahora... ¡sólo 222!
Se trata
de una ofensiva sin precedentes contra nuestro derecho a curarnos de forma
alternativa a la medicina convencional occidental.
Y el
objetivo de este bloqueo es muy claro:
Garantizar
beneficios de miles de millones de euros en los próximos años a la industria
farmacéutica, obligando a los pacientes a usar sus medicamentos, a falta de
alternativas.
Pero hay
esperanza:
En
Inglaterra, una asociación muy activa a nivel europeo, la Alianza para la Salud
Natural, está organizando protestas y enviando correos electrónicos a gran
escala a diputados europeos.
En
Bruselas, el Instituto para la Protección de la Salud Natural ya ha recogido
250.000 firmas de protesta en Francia, Bélgica y Luxemburgo.
En
España, hasta ahora no ha habido ninguna gran movilización en este sentido.
Por ello,
el IPSN, respaldado por un grupo de médicos, pacientes y ciudadanos españoles,
ha decidido comenzar a actuar también aquí. Y le hacemos un llamamiento
urgente.
Desde el
Instituto para la Protección de la Salud Natural en Bruselas, permítame que le
pida lo siguiente:
Actúe. Firme
la petición que aparece abajo en contra del Reglamento 1924/2006/EC. Con este
gesto, y entre todos, defenderemos la Salud Natural en Europa.
Aunque
nunca nadie había pensado antes poner límites a la libre circulación de los
complementos alimenticios naturales, sin embargo los burócratas de Bruselas han
decidido ahora cambiar esta situación.
Para
ello, han decidido obligar a los fabricantes a obtener informes de expertos,
realizar estudios clínicos y preparar expedientes que cuestan una fortuna,
incluso para remedios que han sido utilizados sin ningún problema ¡desde hace
cientos de años!
Se habla
de un coste de 105.000 a 180.000 € por cada suplemento dietético.
Esto se
hace, obviamente, en nombre de "la seguridad del paciente". Sin
embargo, el único resultado concreto será la desaparición de cientos deproductos
naturales utilizados hasta ahora sin ningún peligro para la salud.
Y lo que
es peor, el organismo responsable trabaja tan lentamente que supone una amenaza
para miles de pequeños productores, que se encuentran en peligro de
desaparecer.
Hasta se
podría pensar que lo hace a propósito.
Por poner
un par de ejemplos: decenas de expertos, que representaban a 27 países,
dedicaron casi dos años para que el comité responsable de preparar las
opiniones de la Agencia Europea del Medicamento sobre las hierbas medicinales
reconociera a las semillas del hinojo común sus propiedades como expectorante
antiespasmódico o digestivo, indicaciones conocidas desde hace siglos en la
tradición popular euromediterránea y china.
El caso
de la hoja de vid roja necesitó aún más tiempo: tres años.
No
obstante la vid roja es un remedio conocido desde hace décadas para mejorar la
circulación sanguínea. Docenas de estudios científicos han confirmado su
eficacia y su inocuidad.
Hasta la
fecha, más del 95% de los expedientes de los productos a base de hierbas que se
han presentado han recibido una respuesta negativa por parte de la EFSA.
¿La
razón? Que emite sus decisiones aplicando el mismo modelo -demasiado estricto-
reservado a los procedimientos para los medicamentos químicos.
En
definitiva, el Reglamento 1924/2006/EC es el mayor ataque jamás realizado al
derecho a la información de los enfermos.
¿Cómo
puede usted saber, sin ser un especialista, que:
- el ácido alfa lipoico, un antioxidante multifuncional,
es de un incalculable valor para las personas con diabetes, prediabetes y
para las personas con neuropatías (incluyendo dolores nerviosos)?
- que la Co-enzima Q10 y la carnitina son muy importantes
para la salud cardiovascular, sobre todo para las personas que toman
estatinas (fármacos contra el colesterol)?
- que la glucosamina y la condroitina ayudan a millones
de personas que sufren dolor en las articulaciones?
- ¿o que los ribonucleótidos, tomados por las personas
que tienen un sistema inmunológico debilitado, fortalecen las defensas
naturales y restauran el equilibrio gastrointestinal?
La
respuesta es muy sencilla: usted ya nunca podrá tener esta información,
y lo más probable es que no tenga más remedio que recurrir a los medicamentos
químicos producidos por la industria farmacéutica.
Estamos
ante un escándalo sin precedentes y, según algunos, el momento elegido para
aprobar este reglamento no es en absoluto casual.
Porque lo
cierto es que la aprobación de este reglamento era un asunto urgente... para la
industria farmacéutica, que lo necesitaba para consolidar su posición
dominante, en un momento en el que se encuentra cuestionada.
La
credibilidad del sector farmacéutico se ha puesto en entredicho por escándalos
recientes, como los de los fármacos Vioxx (un antinflamatorio retirado del
mercado porque triplicaba el riesgo de infarto) y Avandia (un antidiabético
también retirado de las farmacias, después de que se demostrara que aumentaba
el riesgo cardiovascular de los pacientes que lo tomaban).
Los
expertos hablan de decenas, de cientos de medicamentos tóxicos que deberían ser
prohibidos.
Por otra
parte, en España, la crisis económica y la reciente exclusión de
cientos de medicamentos de uso común de la financiación de la Seguridad Social
(junto al aumento del copago por parte de los ciudadanos de los fármacos que sí
sigue financiando), animan a los españoles a recurrir a los remedios naturales,
en muchos casos más baratos, libres de efectos secundarios y a menudo igual de
eficaces.
Por ello,
era urgente para la industria farmacéutica suprimir las otras alternativas
existentes.
Y el
nuevo reglamento europeo representa la panacea para esta industria, pues le va
a asegurar sus miles de millones de ganancias anuales durante las próximas
décadas.
¡Indígnese!
Y, por favor, firme la petición que encontrará abajo.
España,
como país miembro de la Unión Europea, deja las manos libres a Bruselas para
imponernos normas que no nos convienen.
Durante
mucho tiempo, esto no ha supuesto grandes problemas en la mayoría de los
países.
Pero hoy la
situación en algunos de ellos está tomando un cariz preocupante. Por ejemplo en
Francia:
- Una asociación francesa ha sido llevada ante los
tribunales por la "venta ilegal" de simples semillas de tomate y
otras frutas y verduras.
- Un horticultor fue sometido a un registro policial,
siéndole incautado su ordenador por la Dirección General de Consumo por
haber utilizado estiércol de ortiga para el cuidado de su jardín.
- Una empresa, también en Francia, fue condenada por la
venta de la planta "cola de caballo" sin autorización de la
Unión Europea.
- Algunos bioagricultores han sido acusados de recomendar
un "pesticida prohibido"; en realidad se trataba de aceite de
neem, utilizado desde hace siglos por los hindúes como antiplagas.
Y
remedios tan sencillos como las cápsulas de ajo o la infusión de romero se
encuentran hoy cuestionados.
Es algo
lamentable que vulnera los derechos de los enfermos y que ataca a los pequeños
productores locales.
Es por
ello que estoy seguro de poder contar con usted para firmar nuestra petición.
Sólo
luchando activamente por nuestros derechos podremos detener la iniciativa
conjunta de las multinacionales farmacéuticas y la Unión Europea.
Hay un
viejo refrán perfectamente aplicable a esta situación que dice que "quien
calla otorga".
Si usted
no firma esta petición, los burócratas europeos deducirán que a nadie le
preocupa su reglamento.
Ellos
pensarán que este enorme regalo que le hacen a la industria farmacéutica y a la
industria agroalimentaria no ha despertado la indignación de nadie.
Así que,
por favor, manifiéstese, porque éste es el momento de la verdad.
Su firma
dará la legitimidad democrática decisiva a las gestiones que desde el Instituto
para la Protección de la Salud Natural estamos realizando.
Y después
de firmar la petición, por favor, reenvíe este mensaje a todos sus contactos.
Dígales
que es el momento de actuar.
No hay
tiempo que perder.
Muchísimas
gracias.
Augustin de Livois
Presidente del Instituto para la Protección de la Salud Natural
Presidente del Instituto para la Protección de la Salud Natural
Organización
sin ánimo de lucro de acuerdo a la ley de 27 de junio de 1921.
PARA FIRMAR LA PETICION SI NO HAS PODIDO HACERLO ACCEDE A
ESTE ENLACE Y BREVE VIDEO, GRACIAS.:
Mira este breve video por favor y lo entenderás...:
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